El restaurante del Club Náutico de Ribeira acoge desde ayer una exposición formada por dieciséis maquetas de barcos realizadas con todo mimo y con la paciencia de un artesano por un marinero jubilado, José Luis Lomba Martínez, natural de A Guardia.
Después de haber dedicado toda su vida al mar, en pesqueros y en mercantes, Lomba encontró hace una década la fórmula perfecta para seguir cultivando su pasión por las embarcaciones.
"Nada de fascículos; nada de comprar e pegar pezas prefabricadas", señala. Y es que Lomba echa mano de todo tipo de materiales para construir pieza a pieza cada maqueta. Los cascos de las naves los monta con cajas de madera de las frutas.
